BIENVENIDAS

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lunes, 8 de agosto de 2016

PADRES PERMISIVOS

El padre permisivo ha recibido tanta información psicológica y educativa sobre el daño emocional que puede causar a su hijo, que esto le ha ocasionado un daño a su sentido de autoridad. Ahora se siente tan inseguro como educador, temeroso de equivocarse y herir a sus hijos que tiene pavor a tomar decisiones. Ha perdido su poder como padre y su responsabilidad la comparte o la entrega en su totalidad a su hijo.

Los padres permisivos delegan su responsabilidad en los hijos para evitar conflicto o por miedo a imponerse y parecer autoritarios. Quieren complacer a los hijos y tenerlos contentos y más que nada temen perder su cariño. Creen que es su obligación convencerlos para que cambien de opinión y dan largas explicaciones que muchas veces terminan en súplicas y ruegos. Para el niño es claro quien tiene el poder, y quién toma finalmente las decisiones.

El padre permisivo considera la toma de decisiones como una especie de “papa caliente” que le quema las manos, y por eso se la avienta al primero que se deja. Es un vaivén de indecisiones entre papá y mamá para no cargar después con las consecuencias.
Ser padres implica ser responsables. Implica arriesgarnos. Implica también correr el riesgo de equivocarnos.

Tanta información nos llena de dudas. Inquietudes normales y sencillas de los niños, se convierten en acertijos indescifrables. Contactar sólo el intelecto y hacer caso omiso de nuestro corazón y sentido común, nos lleva a perder la confianza como padres y nos hace elucubrar en vez de dar solución a la más sencilla de las situaciones. Distorsionamos y perdemos la perspectiva de las cosas en este afán de querer ser padres perfectos.
Las dudas, si les damos un lugar preponderante en nuestras vidas, terminan devorando nuestro sentido de autoconfianza. Nos convencen de nuestra ineptitud y paralizan nuestra voluntad.

Nos ha generado tanto miedo el error que nos ha paralizado la voluntad. Esta parálisis es lo que afecta tanto a los niños.

El miedo a equivocarnos es justificado y un poco de miedo nos lleva al cuestionamiento y a la reflexión. Pero si dejamos que nos invada, terminamos inertes, incapaces de responder a las demandas importantes de nuestros hijos. Cuando actuamos, claro que corremos el riesgo del error, pero si nos quedamos paralizados podemos estar seguros de que los afectamos de manera negativa. Porque un niño con padres paralizados es un niño que se enfrenta solo ante el mundo con sus recursos aún inmaduros e ineficientes.

Los padres permisivos viven con un fantasma que los persigue: el temor a perder el amor de sus hijos. Los padres de antaño no conocían este miedo. Tenían muy claro que su tares no era complacer ni dar gusto, era educar. Aunque su visión de lo que significaba educar era muy limitada, el miedo a perder el cariño de sus hijos no los atormentaba. Este amor se daba por hecho, sin lugar a cuestionamientos.

Los padres de hoy viven algo distinto. Pareciera como que tienen un vacío emocional que necesitan llenar con el amor que reciben de sus hijos. Como si este amor les diera una razón de ser, de existir. Pero este amor, contaminado de miedo, los vuelve dependientes y temerosos, los detiene y los hace titubear cuando es necesario contradecir o limitar. En pocas palabras, parece debilitarlos.

Tenemos que escoger entre recibir de nuestros hijos un amor manipulador, o un amor basado en el respeto. El primero tiene como amigos a la dependencia, el capricho, la culpa y el chantaje. El segundo la libertad, la responsabilidad, la congruencia y la integridad. ¿Cuál preferimos?

En esta época permisiva, el matrimonio cuenta ahora con un nuevo miembro: la culpa. La culpa se ha inmiscuido en las familias con gran éxito, tanto el padre como la madre conviven armoniosamente con ella.
  • Si el padre quiere ponerle un límite al hijo que está tirando la comida, la culpa interviene y le aconseja: “sólo está jugando, ¿Quieres provocar un enfrentamiento?
  • Si la madre no quiere darle un permiso a la hija de 12 años porque le parece riesgoso, la culpa le susurra: “¿Quieres verla triste y enojada?”
  •  Si el padre quiere exigirle al hijo que deje de gritar e insultar la culpa le recuerda: “Se está expresando ¿lo quieres traumar?

Al darse cuenta de lo que no están dando a sus hijos, la culpa invade sus vidas y no les permite decir “no”, ser firmes o poner límites.

Afirmaciones para padres.
  • Confió en mis habilidades para guiar de manera respetuosa a mi hijo.
  • Elijo recuperar mi sentido de autoridad a través de tomar decisiones conscientes.
  • Hago a un lado mi miedo para guiar a mi hijo con confianza y decisión.
  • Soy humano y me puedo equivocar.
  • Yo pongo límites de manera respetuosa a mi hijo cuando lo considero necesario.
  • Tomo con valor la responsabilidad de poner límites a mi hijo
  • Tomo las decisiones que me corresponden para guiar amorosamente a mi hijo. 
DISCIPLINA CON AMOR. Rosa Barocio. Ed. Pax México.

Recuerda somos humanos y todos, absolutamente todos nos equivocamos, no le temas a las equivocaciones son parte del aprendizaje de todos los seres humanos. Nuestro aprendizaje es constante. Amor y equilibrio es fundamental en la educación de nuestros hijos.



viernes, 5 de agosto de 2016

CADA DÍA UN RATO DE DIVERSIÓN

Nunca te vayas a dormir sin haber jugado y reído con él, sin haberle dicho que le amas y cuán feliz te hace su compañía. Cuando el bebé crece, empieza a colaborar en juegos sencillos: le gusta que le tapen la cara con un pañuelo suave y no tarda en quitárselo son una sonrisa picarona y divertida. Les divierte todo lo que hace ruido, tirar objetos al suelo por el gusto de escuchar como suenan el estrellarse; les apasiona cualquier cosa que se mueva o tenga lucecitas que se enciendan y se apaguen, los muñecos suaves, todo lo que se puede apretar, mover o desplazar. Les apasiona chapotear en el agua y meter las manos en papilla para notar la textura pegajosa, chupar objetos y, sobre todo, las cosas nuevas, ya que de pronto se cansan de sus juguetes y desean explorar el mundo que les rodea. Los juguetes o cualquier cosa que se le dé al niño deben reunir los requisitos básicos de no ser tóxico, punzante o tan pequeño que se lo pueda tragar o que ofrezca algún peligro para él.
También adoran las cosquillas y cualquier juego-canción que transcurra por encima de su cuerpo o acabe en algún punto de este, como por ejemplo, la canción de las hormiguitas y los elefantes (con ambas manos se sube por el cuerpo del niño empezando por los pies, mientras se repite “suben, suben, suben las hormiguitas” (ha de ser suave y lento). Luego, al cabo de dos o tres veces las manos se detienen en la cabeza y se dice: “Bajan, bajan, bajan los elefantes” y esta vez el recorrido será con toda la mano entera desde la cabeza a los pies imitando los movimientos pesados de un elefante.


MADRES CREATIVAS HIJOS FELICES, Marta Molas, Ed. Amat.

Una casita
Una casita 
(Con el dedo índice recorres el contorno de la cara del bebé)
muy redondita 
(le tocas la barbilla)
Con dos ventanitas
(le tocas los ojos)
y una puertita
(le tocas la boca)
y un timbre: Riiiiing...
(le tocas el ombligo)

Dos ojitos
Dos ojitos para mirar
Dos orejitas para escuchar
Una naricita para oler
y una boquita que le gusta comer.

Aserrín: ponemos al bebé en nuestro regazo mirando hacia nosotros, le agarramos de las manitas y vamos meciéndolo hacia delante y hacia atrás mientras entonamos esta cancioncilla. Según el bebé vaya haciéndose mayor, el balanceo también puede ser más exagerado. A los niños les encanta casi ponerse boca abajo.

Aserrín, aserrán,
los maderos de San Juan,
piden pan no le dan,
piden queso lo dan un hueso,
piden vino si le dan,
se marean y se van.

La canción de las manitas: sentamos al bebé en nuestras rodillas podemos ponerle tanto mirando hacia donde estamos nosotros, como al lado contrario, y ponemos nuestras manos al alcance de su vista mientras hacemos lo que indica la canción.
Poco a poco, también podrá repetir los gestos.

Saco una manita la hago bailar,
La cierro, la abro y la vuelvo a guardar
Saco otra manita la hago bailar,
La cierro, la abro y la vuelvo a guardar
Saco las dos manitas las hago bailar,
Las cierro, las abro y las vuelvo a guardar.

Palmas palmitas: el niño se sienta en nuestro regazo mirando hacia nosotros o también podemos ponerle en sentido contrario. Le agarramos de las manitas y le ayudamos a aplaudir.
Poco a poco, intentaremos que él solito aplauda. Al final de la canción podemos hacer unas cosquillas en la barriguita del bebé, la próxima vez que le cantes la canción, esperará con una sonrisa, el momento de las cosquillas.

Palmas, palmitas,
higos y castañitas,
azúcar y turrón 
para mi niño/a son.


Los cinco lobitos
Toma el piecito o la mano del bebé y mueve sus deditos uno a uno mientras cantas:

Cinco lobitos tiene la loba,
Blancos y negros, detrás de una escoba.
Cinco tenía. Cinco criaba.
Y a todos los cinco lechita les daba.
Moviendo el dedo gordo del pie.

La canción del caballito: con el bebé o el niño en nuestras rodillas y mirándonos a la cara, comenzamos a cantar la canción mientras elevamos las piernas arriba y abajo con cuidado.
Según digamos al paso, al trote o al galope, movemos las piernas con más velocidad. El bebé querrá repetir una y otra vez la canción del caballito, y además puede ir aprendiendo la diferencia entre despacio y rápido.

En un caballito gris (nombre del niño) se fue a París,
al paso, al paso, al paso...
al trote, al trote, al trote...
al galope, galope, galope…

Este dedito
Agarra el pie de tu niño, y comenzando por el dedo chiquito del pie, mueve uno a uno los deditos con cada verso, terminando con el dedo gordo del pie. Al final hazle cosquillas en los pies.


Este dedito… compró un huevito.
Este lo cocinó.
Este le echó la sal.
Este lo probó.
… ¡Y éste pícaro gordo se lo comió!



martes, 2 de agosto de 2016

USAR EL PODER DE LA VOZ Y DE LA PALABRA CON NUESTROS PEQUEÑOS.

Hablar directamente mirando a los ojos, emplear una voz suave, son medios para tranquilizar al bebé, e introducirle en nuestro mundo de una forma paulatina si la brusquedad que se deriva de ambientes ruidosos, crispados o desorganizados que irritan al recién nacido hasta causarle toda clase de trastornos físicos y emocionales. Hablarle, contemplarle, observarle y escucharle es el camino para un entendimiento madre-hijo que sentará unas buenas bases de comunicación mutua.

Llámale por su nombre y elige un nombre que te guste y que sólo sea para él. Olvídate de que tu abuelo también se llamaba así o de esa tía que adorabas, ahora es el nombre de tu hijo y debes permitir que tu bebé lo llene de significado emocional, que cuando oigas su vocecita o alguien pronuncie su nombre, sientas que esa palabra desvela en ti un cúmulo de sensaciones nuevas e irrepetibles.

Los niños están mejor preparados para atender voces agudas como la de otros niños o a vozarrones exagerados como cuando imitamos a un oso, un ogro, un brujo o un gigante, siempre que escenifiquemos o contemos un cuento, tratemos de dar énfasis a la lluvia, al oleaje, la tormenta o las voces de los animales (sonidos onomatopéyicos), alternando los graves con los agudos según sean las características de la persona, animal o cosa que tratemos de imitar (agudas: niños, princesas, ratones, objetos inanimados y animales pequeños.

Debemos tener en cuenta todo lo que el tono y el timbre de nuestra voz pueden transmitir aun sin analizar las palabras ni el significado de las mismas. Demasiado enérgica crea ansiedad; demasiado exigente, crispa; demasiado dura, alerta; demasiado melosa, duerme; demasiado protectora, anula; demasiado titubeante, crea inseguridad , demasiado blanda , induce a la tiranía. La voz es un reflejo de la disposición de nuestra alma y de nuestra actitud interior hacia el niño, que no tarda en descubrir nuestras flaquezas y debilidades y la forma de dominarnos o lograr salirse con la suya en el pulso que, inevitablemente, se establece entre la personalidad de la madre y del niño.


La voz es un gran aliado cuando se usa para convencer, para animar, para motivar, para ser positivo, y es un arma terrible cuando se utiliza para descalificar, humillar, criticar destructivamente, intimidar, insultarlo desmerecer. El poder de nuestras palabras, de nuestro afecto, de nuestra intención, de los sentimientos… es un don que no podemos desaprovechar, sería enormemente educativo cuidar y educar nuestra voz, escucharla y percibir en ella nuestras insatisfacciones, frustraciones y conflictos, para no transmitírselos a nuestros hijos. Calidad y no cantidad, nunca mejor aplicado cuando nos referimos a la voz, elemento básico de conexión relación y comunicación con el entorno.

MADRES CREATIVAS HIJOS FELICES. Marta Molas. Ed. Amat.

miércoles, 27 de julio de 2016

ELOGIAR A LOS NIÑOS ¿BUENO Ó MALO?

Durante los últimos diez años,  la Doctora Carol Dweck y su equipo de la Universidad de Columbia han estudiado el efecto de los elogios sobre los estudiantes en veinte escuelas en Nueva York. Antes de estos experimentos se había demostrado que elogiar la inteligencia potenciaba la confianza de los niños. Pero Dweck sospechaba que esto sería contraproducente en cuanto el niño fracase o experimente alguna dificultad.
Dweck descubrió que quienes creen que la inteligencia innata  es la clave del éxito empiezan a descartar la importancia del esfuerzo. “Soy listo –razona el niño-; no necesito esforzarme”. Hacer esfuerzos llega a 
La profesora de psiquiatría de la Universidad de Nueva York Judith Brook explica: “El elogio es importante, pero no el elogio vacío –dice-. Tiene que basarse en algo real, alguna habilidad o talento que el alumno tenga.
Los investigadores del Reed College y de Stanford revisaron más de 150 trabajos sobre el elogio. Sus análisis determinaron que los alumnos elogiados se vuelven reacios al riesgo y sienten que no tienen autonomía. Cuando llegan a la Universidad, los alumnos más elogiados prefieren abandonar las clases que sufrir  una nota mediocre, y les cuesta mucho elegir licenciatura tienen miedo de comprometerse con algo porque temen no tener éxito.
Una profesora de Nueva Jersey me dijo que podía distinguir a los niños que reciben demasiados elogios en casa. Sus padres piensan que le están dando apoyo, pero los alumnos notan las elevadas expectativas de sus progenitores, y sienten tanta presión que no pueden concentrarse en el tema, sólo en la nota que reciben. Una madre me dijo: “Estás destruyendo la autoestima de mi hijo” porque le había puesto una baja calificación. Y yo le respondí  “tu hijo es capaz de hacerlo mejor”. Yo no estoy aquí para que se sienta mejor. Estoy aquí para hacer que lo haga mejor.
La doctora Carol Dweck y otros han descubierto que los niños más elogiados se vuelven más competitivos y más interesados en derrotar a los demás. El mantenimiento de la imagen se convierte en su principal preocupación.
La actitud que Dweck quiere que tengan los estudiantes – una creencia firme en que la manera de recuperarse de un fracaso es trabajar más duro, inténtalo, inténtalo otra vez.
La gente que posee este rasgo de persistencia se recupera bien y puede mantener su motivación durante extensos periodos en los que se pospone la gratificación. Ahondando en esta investigación, aprendí que la persistencia es algo más que un acto consciente de la voluntad; también es una respuesta inconsciente gobernada por un circuito cerebral. Este circuito controla el dentro de recompensas del cerebro y, como un interruptor, interviene cuando no hay una recompensa inmediata. Cuando se activa, le dice al resto del cerebro “No dejes de intentarlo. Hay dopamina (el premio que ofrece la química cerebral por tener éxito) en el horizonte”.
El cerebro tiene que aprender que es posible resolver los episodios frustrantes. “La persona que crece recibiendo premios demasiados frecuentes no tendrá perseverancia, porque abandonará cuando el premio desaparezca”.
Ofrecer elogios se ha convertido en una especie de panacea para la ansiedad de los padres modernos. Como estamos alejados de la vida de nuestros hijos desde el desayuno hasta la cena, cuando llegamos a casa tratamos de compensar; en esas pocas horas que pasamos juntos, queremos que oigan las cosas que no pueden oír durante el día: “Estamos de tu lado”, “estamos aquí para apoyarte”, “creemos en ti”.
Esperamos mucho de ellos, pero ocultamos nuestras expectativas detrás de los elogios constantes.
Me di cuenta de que no decirle a mi hijo que era muy listo significaba dejar que llegara a sus propias conclusiones con respecto a su inteligencia. Intervenir con nuestros elogios es como dar la respuesta a un problema de su tarea con demasiada rapidez; le quita la oportunidad de hacer la deducción por sí mismo.

EDUCAR HOY. Po Bronson & Ashley Merryman. Ed. Sirio




ALTERNATIVAS A  EL ELOGIO COMUN "ERES MUY INTELIGENTE"


  1. Vaya! Qué has hecho? Cuéntame!": El niño ve que nos interesamos y seguro que está encantado de darnos más detalles.
  2. "Te has esforzado mucho para hacer esto, verdad? Estás orgulloso?": En vez de centrarnos en el resultado nos centramos en el esfuerzo y fomentamos la motivación interna del niño.
  3. "Se te ve muy feliz! Estás contento de haber conseguido hacer esto?": Nuevamente nos centramos en su sensación de logro y en su auto-motivación.
  4. "Veo que has...": Simplemente describimos lo que ha hecho, estamos reconociendo su trabajo pero de una manera neutral.
  5. "Lo has conseguido!": Cuando somos conscientes del gran esfuerzo que le ha costado conseguir algo, es una buena ocasión para reaccionar más efusivamente.
  6. "Fíjate! Antes no podías hacer esto y ahora sí!": Nos centramos en el hecho de que el niño está creciendo y aprendiendo.
  7. "Gracias! Me gusta que hayas hecho esto para mí!": Cuando el niño ha hecho algo para regalárnoslo por supuesto hay que agradecérselo.
  8. "Esto no lo habías hecho nunca! Cómo has aprendido?": En este caso le damos valor al proceso de aprendizaje.
  9. "Me gusta lo que has hecho, podrías enseñarme a hacerlo?": Con esta reacción le estamos enviando al niño el mensaje de que su trabajo nos gusta tanto que nos gustaría aprender a hacerlo, y que él tiene la capacidad de enseñarnos.




martes, 26 de julio de 2016

Futura Mamá

Emociones y sentimientos que favorecen a la futura madre.
v  Sentirse acompañada.
v  Sentirse amada, cuidada y respetada por su pareja.
v  Vivir el embarazo con alegría.
v  Estar rodeada de cariño.
v  Estar inmersa en un ambiente acogedor que le haga sentirse segura.
v  Reír y divertirse.
v  Saber que su compañero comparte con ella la trascendencia de lo que están viviendo y que también es importante para él.
v  Tener confianza en los especialistas que la ayudarán en el parto.
v  Ser tratada con ternura y recibir atenciones especiales cuando se encuentre incómoda o necesite más descanso del habitual.
v  Sentirse comprendida.
v  Confiar en ti misma y estar tranquila y relajada.
Ideas prácticas para conseguir bienestar emocional.
v  Aprender a respirar, a relajarse. Hacer yoga y meditación.
v  Cerrar los ojos y sentir los movimientos del bebé.
v  Hablar con el bebé, contarle cuentos y cantarle.
v  Preparar la casa para cuando llegue.
v  Evitar situaciones, personas o lugares que le causen estrés, malestar o sentimientos negativos.
v  Evitar situaciones angustiosas, violentas o agresivas que la perturben.
v  Escuchar música.

v  El contacto físico afectuoso de su pareja o hacer el amor (siempre que ella lo desee). Favorecerán su bienestar emocional.

MADRES CREATIVAS HIJOS FELICES. Marta Molas. Ed. Amat.

lunes, 25 de julio de 2016

Educando

Si tus hijos están pegados al televisor se convertirán en meros espectadores, todo transcurrirá ante ellos como una película en la que no se sienten implicados: jamás serán protagonistas de su propia vida. Hay que cultivar el juego, la exploración del mundo que nos rodea, el placer (dando valor y deleitándonos en lo que vemos, olemos, escuchamos, sentimos, comemos, vivimos), la sorpresa, la novedad, el cambio, la transformación y la confianza, no favorecer el inmovilismo, la negatividad, la indiferencia, la postergación, el miedo, el derrotismo y el negativismo.
Pero para conseguir niños despiertos y motivado hay que trabajar con ellos desde muy pequeños dedicándoles tiempo y sobre todo brindándoles calidad efectiva y experimental, sin caer en actitudes protectoras, sensibleras o sentimentales, porque nadie puede crecer sin obstáculos, y rodearles de “algodones” no favorecerá para nada su maduración. Prueba a que intenten superar por sí mismos las pruebas de su camino y llegarás a sorprenderte de sus recursos. Y no dudes de que si la base afectiva que les has proporcionado es sólida, difícilmente loe abatirá el primer huracán que pase; sabrán cimbrearse como el junco y volver a erguirse fortalecidos y mucho más seguros de sí mismos. Sólo implicándose, viviendo, experimentando y aceptando que el dolor es un buen maestro se consigue aprender para que la próxima vez no te cojan desprevenido.

MADRES CREATIVAS HIJOS FELICES, Marta Molas, Ed. Amat

En otras palabras fomentar la resiliencia en los niños, es decir que nuestros hijos no se queden en la carencia, que hagan algo bueno, algo funcional, algo positivo a partir del dolor.

Les recomiendo leer HIJOS FUERTES, Julia Bobolla, Ed.Escuela para padres.
Es un manual práctico con estrategias comprobadas para que nuestros hijos (y nosotros mismos) seamos más fuertes para enfrentar la vida y sus inevitables penalidades y así salir fortalecidos de la adversidad.


sábado, 23 de julio de 2016

GRATITUD

Para muchos de nosotros, ser conscientes de nuestras bendiciones es un procedimiento nuevo. Vamos por la vida de manera inconsciente. No nos damos cuenta de todas las cosas buenas que experimentamos, pero con facilidad podemos describir cada experiencia negativa en sus detalles más dolorosos. El optimismo es una actitud podemos escoger y es la recompensa al contar nuestras bendiciones, Cuando enumeramos todas las cosas buenas que nos suceden, nuestra lista de bendiciones crece aún más. Al principio enuncia sólo algunas pocas, pero en cuanto las dices, parece que se multiplican.

Conforme hacemos una lista de nuestras bendiciones y los beneficios que conllevan, nos sentimos más felices y más seguros. Al nombrar los dones que recibimos, comprendemos que somos más conscientes de ellos. La gratitud crea gratitud.

La lista de agradecimientos es una herramienta muy poderosa. Con frecuencia se siente como si “todo” estuviera  mal, aun cuando no es nunca el caso. Al hacer una lista de nuestras bendiciones puede desencadenar nuestra gratitud al recordarnos todas las cosas que están bien en nuestra vida. Esta herramienta no necesita más que de unos minutos y puede ser divertido que nuestros hijos también lo hagan. Incluso puede simplificarse al pedirles que enumeren cosas que a ellos les “gusten” en sus vidas. El cambio espiritual en perspectiva es el mismo.

EJERCICIO

Tanto tu como tu hijo se beneficiarán al expresar gratitud. Juntos tomen turnos para nombrar las cosas por las que sienten agradecimiento. La gratitud quita la presión y este ejercicio inmediatamente permite recuperar el equilibrio emocional.


Elige un documento de tu lista y pídele a tu hijo que haga lo mismo. Ahora, hagan una “ofrenda creativa” con aquello por lo que sienten agradecimiento: hagan un dibujo, escriban una canción o un poema. Conforme tu hijo y tú compartan sus ofrendas con el otro, están apreciando y honrando aquello por lo que se sienten agradecidos.

El camino del artista para padres. Julia Cameron. Ed. Aguilar.

jueves, 21 de julio de 2016

MUJER CREATIVA

La mujer creativa favorece la relación de pareja, más dada a expresar emociones y sentimientos, busca la comunicación a todos los niveles, pero a menudo se acaba cansando de un hombre que elude el diálogo y la intimidad. Algunos hombres edifican murallas a su alrededor o se evaden en el trabajo y en las aficiones antes que trazar puentes entre ellos y su pareja, parece que su actitud es de “dejar apagar las brasas” sin intentar “soplar de nuevo para avivar el fuego”. En general, es la mujer la que propone buscar ayuda para “salvar la pareja”, y no se rinde hasta que está segura de que no le queda otro remedio que romper con lo que construyó con tanto esfuerzo y tanto amor: la casa, los hijos, el hogar… pertenecen a la idea de “unión” y van asociados a la mujer. Ella es la que une, la creadora, la constructora; mientras que el hombre representa la búsqueda de nuevos territorios, la conquista de algo nuevo: la libertad. Por supuesto ambos conceptos necesitan asociarse: amor sin libertad es asfixiante y destructivo; libertad sin amor conlleva egoísmo y soledad.
Parece que las mujeres hayan enarbolado una bandera en la que exhiban algo así como: “Si tu no quieres caminar hacia adelante, lo haré yo sola”. Y se lanzan a la apasionante búsqueda de sí mismas, a veces se confunden, se vuelcan completamente hacía el exterior y acaban imitando al hombre adicto al trabajo; otras descubren que es hacia adentro donde hay que mirar, y trasladan sus necesidades de amor y libertad a su propia vida, convirtiéndola en algo más auténtico y más acorde con lo que alma precisa, utilizando se creatividad para ser las propias artífices de su historia personal.

Libro MADRES CREATIVAS, HIJOS FELICES Martha Molas Ed. Amat.

Les recomiendo leer el libro de John Gottman y Nan Silver ¿Qué hace que el amor perdure? Ed. Paidos

Gottman nos explica cómo una pareja puede proteger y recuperar su mejor regalo: su amor por el otro.  



martes, 19 de julio de 2016

ENSEÑANDO SOLIDARIDAD A NUESTROS HIJOS


Los niños amados y estimulados con el debido contacto de sus padres, deben saber que no venimos a este mundo a explotarlo hasta agotar sus recursos, sino que debemos devolver  -a nuestro modo y como podamos- el privilegio de vivir en el planeta, que sepan que es de todos, y que es necesario que cualquiera de nosotros aporte algo para mejorar la vida de todos. En la escuela compartiendo lo que sabemos hacer, con los amigos e incluso con los desconocidos. Ayudar a los compañeros a hacer los problemas de matemáticas. Repartiendo sonrisas, reciclando el papel, escuchando a un amigo… lo importante es estar abierto y dispuesto a dar algo de uno mismo, no necesariamente cosas, a veces es suficiente con un abrazo o una llamada, con darle la mano a un niño con el que nadie quiere jugar, con no burlarse del alumno gordo del que todos se ríen y sentarse con él en clase, hay muchas maneras de ser solidario y no se necesitan grandes hazañas. .


Lo que se da, sea negativo o positivo, la vida lo devuelve multiplicado.

Libro MADRES CREATIVAS, HIJOS FELICES Martha Molas Ed. Amat.

Este tiempo de vacaciones es ideal para fomentar valores a nuestros hijos. Les dejo enlaces de cuentos en vídeos para que los vean juntos, también otros enlaces para los niños mas grandes, no tienen ilustraciones pero pueden leerlos primero y después hacer un dibujo de lo que se imaginaron al leerlo, les estimula mucho su imaginación.


Bajo una Seta

Una familia frande para un nido pequeño

El pequeño bosque bajo el mar

Cuentos de solidaridad

Si lo prefieren pueden acudir a una biblioteca o libreria para consultar o comprar libros sobre solidaridad.

lunes, 18 de julio de 2016

Luego se quedó muy pensativa cuando oyó por primera vez un concepto totalmente nuevo y revelador que la hizo repetir para sus adentros: "Tengo derecho a estar informada porque eso me permite tomar mejores decisiones". La palabra "derecho" fue nueva para ella...
DIGNIDAD ENCARNADA, Silvia Gurrola Bonilla
¿Cuántas mujeres en México desconocen la palabra Derecho?

sábado, 16 de julio de 2016

EDUCACIÓN CREATIVA

La educación creativa es la que se basa en animar a realizar lo que cuesta, lo difícil, ser capaces de romper límites e impedimentos mentales como "no puedo", "no me sale", "no sirvo para esto", atreverse a probar cosas nuevas, confiar en su capacidad e infundirles valor para que sigan sus propios gustos e inclinaciones. 

Libro MADRES CREATIVAS, HIJOS FELICES Martha Molas Ed. Amat.

jueves, 14 de julio de 2016

silviagurrola.com - A nombre de mi género

silviagurrola.com - A nombre de mi género


A NOMBRE DE MI GÉNERO
Mujer
Discúlpame a mí y a mi género
Por los milenios de vida subyugada
Y por los millares de muertes en la hoguera
Finalmente aprendí a respetar tu cuerpo
Pues es a ti a quien pertenece
Luchemos hombro con hombro
Para erradicar las normas que lastiman tu cuerpo
Para que no seas objeto de compraventa
Para que la pornografía no te obligue a exhibirte
Para que nunca más seas violada
Para que nadie te acaricie con manos incestuosas
Para que las garras de la prostitución no te aprehendan
Mujer,
Asume tu papel ancestral de consejera
Que te empape la justicia a la que simbolizas
Y enséñanos a recuperar el amor por la madre naturaleza
Ahora puedo reconocer la energía femenina
Que está en ti, en mí, en el universo entero
Mujer
Vivamos con respeto mutuo
Empecemos de nuevo
Juntos podremos recuperar la dignidad perdida
Si aún no la has leído, La Dignidad Encarnada, aquí te comparto las primeras 40 páginas de la historia:https://books.google.com.mx/books?id=PkAGBAAAQBAJ&printsec=frontcover&hl=en#v=onepage&q&f=false 

Tomado de la pagina de Silvia Gurrola. http://www.silviagurrola.com/notas-e-inspiraciones/4-a-nombre-de-mi-genero