Hay veces que a mitad del día ya sentimos que nuestras energías están en cero, no hay caso, no importa que hayamos dormido bien o mal, la cuestión es que nos queda gran parte del día por vivir y ya no tenemos energía. Es en esos casos cuando se vuelve necesario tomar una buena siesta.
Una siesta no significa que seamos perezosos, todo lo contrario, porque tomando una siesta mejoramos nuestro desempeño ya que ésta es una forma natural de disminuir el estrés, mejorar las funciones cognitivas, estar más alertas y mejorar nuestra capacidad de reacción.
Durante la noche necesitamos dormir unas 7 u 8 horas a diario, y durante la siesta con unos 20, 25 minutos ya estaremos bien.
Dormir es fundamental para la salud, cuando duermes menos de 6 horas por día estás poniendo en riesgo tu cuerpo, porque el sueño es acumulativo, entonces al perder horas de sueño un día, tendrás que buscar la forma de recuperarlas al siguiente.
Cuando estamos hablando de la siesta, ésta no deberá ser más larga de 30 minutos, de lo contrario estaríamos llegando a etapas más pesadas del sueño y será más difícil despertar.
Para lograr dormir una buena siesta y tener un buen descanso durante la noche lo mejor es que: no consumas más cafeína luego de las 3pm. Este estimulante puede hacer más difícil que logres conciliar el sueño.
También puedes programar la alarma, sino quieres dormir durante mucho tiempo, puedes tomar una siesta y programar el despertador para que no se te pasen las horas durmiendo.
Si eres de las personas que no disfrutan de tomarse unos minutos para dormir a la mitad del día, puedes meditar. Con unos 30 minutos de meditación diariamente lograrás los mismos efectos positivos que al dormir una siesta.
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