http://www.familia.cl/Matrimonio/felicidad/claves.htmEmpezar  cada día "con la cuenta en cero"; regalar tiempo; acoger; permitir  al otro ser él mismo; darse; "querer al otro como quiere ser querido"  son algunas de las estrategias ganadoras para la vida matrimonial.
Fuente:  Padres OK 
Así  como ciertas actitudes ‘matan pasiones’, hay otras que promueven y fomentan  el crecimiento de la pareja. 
Las  estrategias ganadoras, como señalan las autoras de “Secretos y complicidades  del matrimonio”, “son aquellas que potencian nuestros aspectos lúcidos  y luminosos y que se reconocen porque se acompañan de vivencias y experiencias  positivas. (…) Incrementan la seguridad y confianza en los recursos personales,  afianzan nuestro bienestar y felicidad, lo que de modo directo o indirecto, verbal  o no verbalmente, se transmite al cónyuge. (…) Muchas de estas estrategias  se van descubriendo y construyendo a partir del conocimiento profundo del otro;  por ello no existe “una sola” receta”.
A  continuación tomamos 7 estrategias ganadoras descritas en “Secretos  y complicidades del matrimonio”, como para reflexionar y tener en cuenta.
"¿Ceder?"
Si  bien muchos creen que en la vida matrimonial es muy importante aprender a ceder,  otros afirman que hay que “optar por el amor”. 
Un  matrimonio afirmó que “ceder es transformar la relación en  desigual; nosotros no cedemos para nada, negociamos soluciones satisfactorias  para ambos”. 
Al ceder,  comentan, sienten que opacan el amor con las sombras de los resentimientos que  se crean, más aún, agregaron: “por convicción y doctrina  optamos por el amor, no nos imaginamos 50 años cediendo”. 
Ellos  están en lo cierto, porque al ceder uno siente que pierde algo en sí,  en cambio, cuando se opta por el amor, se da y entrega dentro del matrimonio,  definido como “una comunidad de vida y amor”.
“Querer  al otro como uno quiere ser querido”
Entre  las estrategias que mejoran la convivencia, sin duda hay que subrayar aquella  en la que los cónyuges han decidido amarse, esto es, querer al otro como  uno mismo quiere ser querido. 
Como  señala un marido, “amar es independiente de lo que hacemos, porque  ciertamente muchas veces actuamos de forma tal que desquiciamos al otro; incluso  puede ser tanto el desatino de su actuar que podemos llegar a considerarlo un  desastre. Yo percibo en ella algo así como: a pesar de lo que hiciste,  te amo. De hecho aprendí de ella esa decisión de amar.
"Darse"
Esta  capacidad de donación, en todo orden de cosas, se vuelve una experiencia  que nos ayuda a ser distintos. 
Como  dice un marido, “yo era más egoísta, puedo ser generoso con  la plata, pero egoísta con mi tiempo, con lo que pensaba hacer, con lo  que yo creía que era el modo de hacer las cosas, pero al no ver en ella  egoísmo, al ver que ella me permitía ser y hacer, fui cambiando,  transformándome y hoy no soy el mismo que era antes de comprender este  secreto”.
“Saber  que puedo ser yo”
Al  “sentirse tal como uno es”, no criticado, se genera un clima donde las  diferencias pueden ser habladas sin sentirse amenazado; ello permite ser persona,  ser uno mismo, libre, espontáneo, presentarse sin máscaras.
Según  explica una esposa, “es muy importante aceptar al otro tal como es; yo en  mi caso tiendo a querer cambiarle las conductas que me molestan, ahora pienso  que lo mejor es admitirse y tolerarse. El apoyo saca lo mejor; saber que puedo  ser yo, libre espontáneamente. Es fundamental la libertad dentro de la  pareja, saberse aceptado, poder decidir solo y saber que al otro no le va a parecer  espantoso. El respeto potencia lo mejor, y aleja la posibilidad que nos descalifiquemos”.
"Acogimiento"
“El  acogimiento de ella saca de mí lo mejor; es algo que reduce las tensiones,  porque cuando uno llega angustiado, enrollado, sin poder pensar y lo reciben bien,  automáticamente baja la presión, y cuando uno está desanimado  se activa”, cuenta un esposo. 
Asimismo,  “cuando me enredo mi marido me ayuda a aclararme, si estoy indecisa reduce  mis dudas; en todo eso el capta muy bien lo positivo que hay en mí y trata  de que aflore”.
"Dar  tiempo"
Existen  otras maneras de donarse y, entre ellas, los matrimonios enfatizan la importancia  de “entregar parte de su tiempo personal”, para construir el matrimonio,  como decisión consciente y voluntaria. 
Se  preguntarán ¿cómo? Una de las formas señaladas fue  por medio del cultivo de la vida de relación, participando en “grupos  de matrimonios en los que se habla con la verdad; un lugar y un tiempo para mirar  de frente los aspectos buenos y aquellos que no lo son. Se es matrimonio en la  vida cotidiana, desde que se amanece hasta que termina el día, aun cuando  ello no signifique pasar las 24 horas del día juntos. Por ello es importante  invertir tiempo y energía”.
Las  parejas contaron a las autoras de “Secretos y complicidades en el matrimonio”,  que no basta con ir a cursos y charlas sobre los niños, las que sin dudas  pueden ayudar a ser buenos padres. “Si privilegiamos el rol de padres a costa  de la pareja, podemos pasar años sin oír hablar del matrimonio,  sin vivirlo”.
"La  cuenta en cero: optar por el hoy"
Otro  aspecto que destacaron fue “optar diariamente por empezar de nuevo”.  Aunque ello no significa olvidarse del día anterior o del que vendrá  mañana, puede ser muy esperanzador saber que con cada amanecer se presentan  nuevas posibilidades, afanes distintos, que no hay un débito o una cuenta  pendiente por pagar. 
La  esperanza es una virtud relacionada con la confianza. Como indica una esposa,  “la esperanza para nosotros es fundamental y ello se traduce en la opción  de empezar todos los días de nuevo; a veces la gente no nos cree, porque  las posibilidades de discutir y de pelear son mayores, pero tener la decisión  de partir todos los días con la cuenta en cero es muy alentador”.